Nombre común: Varano de la sabana (Varano de la Savannah)

Familia: Familia Varanidae

Biotipo: la mayor parte se distribuyen ampliamente por zonas áridas, semiáridas y desiertos.

Distribución: La zona este de África central hasta la zona del oeste africano.

Forma:
Es un varano fuerte, bastante ancho, con cabeza y cuello robustos, extremidades poderosas con largas garras, larga cola y lengua bífida de color morado o azulado. A diferencia de muchos otros varanos no posee un hocico demasiado esbelto y alargado.

Coloración:
Tonos marrones con dibujos en forma de círculos blancos y grisáceos.

Tamaño:
En cautividad puede pasar perfectamente del metro de longitud llegando incluso hasta 1.20m.

Diferencias sexuales:
Hasta los 5 o 6 meses de edad es casi imposible determinar el sexo de estos varanos, pero a partir de esta edad la presencia de los hemipenes en los machos y de los hemiclítoris en las hembras empiezan a evertir y en los machos son de mayor tamaño y en la base de la cola se le notan los bultos de los hemipenes.
Además por norma general los machos suelen ser de mayor longitud.

Temperatura:
La temperatura diurna debe oscilar entre los 28º y los 32º mientras que la temperatura nocturna debe descender unos grados.

Agua:
Necesitarán un gran recipiente de agua porque les gusta de vez en cuando sumergirse y refrescarse, por lo que el recipiente debe ser bastante amplio para que pueda introducirse de forma total. Aunque la humedad no debe ser elevada.
También defecará aquí, por lo que es muy aconsejable otro recipiente para que el varano beba.
Recordar una vez más la importancia de limpiar y cambiar periódicamente el agua para mantener una higiene adecuada.

Terrario:
Necesita un terrario amplio para que puedan estar a gusto y no estresarse por el agobio de un terrario reducido, unas medidas aproximadas serían 160X60X60 mínimo. Cuanto mas largo mas ejercicio hará y será por tanto menos propenso la obesidad que es tan común en esta especie.
Les gusta mucho trepar por lo que dispondremos en el terrario de troncos, ramas y algunas piedras grandes para que pueda subirse a ellas.
Para evitar problemas intestinales como la impactación utilizaremos como sustrato papel de periódico, césped artificial o fibra de coco seco.
Es importante que dispongan de una cueva o dos incluso, lo bastante grandes como para que puedan entrar en ella sin problemas.
Pero como siempre decimos no es importante tener una decoración excesiva por la incomodidad a la hora de limpiarlo.
Como buen saurio necesita una luz especial para reptiles con radiación de luz uvb y uva con un espectro medio que le ayude a asimilar bien el calcio y sintetizar la vitamina D3.
Son muy aconsejables los baños de luz solar natural siempre que sea posible sacarles a solearse, no es muy adecuado que sea a través del cristal, mucho mejor si estos baños de sol los recibe directamente.
El fotoperiodo deberá ser mayor en verano, unas 12 horas, en invierno se reducirán las horas levemente.
Como calefacción puede utilizarse focos de luz de incandescencia o infrarrojos para aumentar la temperatura ambiente y el varano pueda termoregularse eligiendo la temperatura ideal para él en cada momento.

Reproducción:
Es una especie ovípara, es decir, la hembra pone los huevos que luego habrá que incubar.
Una vez que el macho comience el cortejo con bruscos movimientos de cabeza y cuello o por medio de pequeños mordiscos a las hembras, si la hembra acepta, tendrá lugar la cópula.
Un mes después la hembra pondrá en torno a 20/50 huevos.
Después de un largo proceso de incubación, entre 5 y 6 meses a una temperatura de 28º/30º nacerán las crías, que deberán ser alimentadas con insectos pequeños con respecto a su tamaño.
Comportamiento: Como todos los varanos no son nada “amistosos” ni con su dueño ni con los de su propia especie, tienen un carácter muy fuerte, y es bastante probable que con el tiempo y el trato con nosotros tampoco mejore su carácter, si se tiene que manipular lo ideal es hacerlo con guantes de cuero para evitar que nos pueda herir con sus poderosas mandíbulas.

Alimentación:
En su juventud estos varanos pueden alimentarse principalmente de una dieta insectívora, grillos, zophobas, gusanos de cera, algún tenebrio...siempre espolvoreados con los aportes vitamínicos especiales para saurios unas 5 veces al mes.
Incluso pueden comer comida de perro como “golosina” de vez en cuando, y si puede ser con un contenido bajo en grasa mucho mejor, porque estos varanos son muy propensos a la obesidad, por lo que hay que cuidar mucho este aspecto y controlar la dieta, ya que prácticamente todo lo que le echemos se lo comerá y esto no le beneficia para nada al animal ya que estaríamos acortando su vida.
Según vaya creciendo también podemos ofrecerles roedores acordes con su tamaño.